LA AUTOESTIMA EN LOS NIÑOS

¿Cuáles son las señales de una baja autoestima?

Hay que  estar pendiente de las siguientes señales que por un lado podrían ser respuestas cotidianas a cómo el niño se relaciona con el mundo que le rodea, o pueden ocurrir solo ocasionalmente en situaciones específicas. Cuando se convierten en un patrón de comportamiento repetitivo, entonces podemos intuir  la existencia de un problema. No todas tienen porque darse, ni que se den quiere decir que estemos ante una problema de falta de autoestima, hay que valorar la conducta en su conjunto. 

• Si evita una tarea o desafío sin siquiera intentarlo. A menudo, esto indica un miedo al fracaso o una sensación de impotencia.
• Engaña o miente cuando cree que va a perder un juego o que no va a obtener un buen resultado.
• Muestra señales de regresión, al actuar como niño pequeño o de manera tonta. Este tipo de comportamiento provoca que otros niños le pongan apodos o le insulten, lo que añade insultos a la ecuación.
• Se vuelve controlador, dominante e inflexible como una forma de ocultar los sentimientos de insuficiencia, frustración o impotencia.
• Inventa excusas ("El maestro es tonto") o minimiza la importancia de los eventos ("No me gusta ese juego de todos modos"), utiliza este tipo de racionalización para culpar a los demás o a fuerzas externas.
• Sus calificaciones han disminuido o ha perdido interés en actividades habituales.
• Se aleja socialmente, perdiendo o teniendo menos contacto con los amigos.
• Experimenta cambios de ánimo, muestra tristeza, llora, presenta arranques de ira, frustración o tranquilidad.
• Hace comentarios autocríticos como "Nunca hago nada bien", "No le caigo bien a nadie", "Soy feo", "Es mi culpa" o "Todos son más inteligentes que yo".
• Tiene dificultad para aceptar cualquier elogio o crítica.
• Percibe o le preocupan de manera excesiva las opiniones que las demás personas tengan sobre él.
• Parece que le afecta la influencia negativa de los compañeros y adopta actitudes y comportamientos como el desprecio por la escuela, faltando a clases, actuando irrespetuosamente, robando o experimentando con el tabaco, alcohol o drogas.
• Es excesivamente servicial o nunca ayuda en casa.

Una educación con refuerzo positivo contribuye a un buen desarrollo de la autoestima del niño.

Pautas:

 Entre otras las mas destacadas serian :

1.   Demostrarle  siempre  amor y afecto. Todas nuestras acciones desde la infancia, se deben hacer con afecto y amor. Un bebé que fue tratado con amor y afecto tendrá la sensación subconsciente que es lo suficientemente digno e importante para ser amado.
2.   Felicitarles. Darles tantos elogios como sea posible, siempre que haga  algo correctamente. Decirles, "Estoy muy orgulloso de ti. Eres muy especial. Me gusto la manera que lo has hecho. “Encontrar siempre la forma de reforzar y destacar lo positivo en caso de que no lo hay hecho bien.
3.  Los elogios creíbles. Es importante, sin embargo, que los elogios sean creíbles. Los elogios exagerados como, "Eres el mejor del mundo. Eres la persona más agradable que existe " pueden ser contraproducentes. El niño desarrollará un ego exagerado, y esto puede afectar la relación con sus amigos, y a la larga, tendrá un efecto negativo en su autoestima.
4.    Fijar metas. La meta debe ser alcanzable, ya que una meta alta puede producir el efecto contrario, es mejor empezar con una asequible que le estimule a conseguir la siguiente. (vestirse solos, conseguir una mejor nota  en la próxima prueba y mientras el niño se esfuerza en lograr la meta, acompáñelo y felicítelo a cada paso del camino.
5.   Se critica  la acción, no a la persona. Cuando haga algo negativo,  “eso que has hecho no está bien “en lugar de decir eres muy malo.
6.   Tener en cuenta sus  sentimientos. Cuando sufra un golpe a la autoestima, es importante considerar sus sentimientos. Hay que hacerle llegar que se entiende como se está sintiendo en ese momento, que es normal sentirse mal por una mala acción de otra personan si  siente que sus sentimientos son importantes y tomados en cuenta, él estará abierto para  hablar y escuchar.
7. Nunca compararle con otros. Cada uno tiene sus cualidades, no tienen por qué ser mejores.

Estar atento a su comportamiento y un refuerzo positivo en la educación son sin duda los mejores factores de protección.